La inflamación tipo 2 es el común denominador de enfermedades respiratorias (asma grave y rinosinusitis crónica con pólipos nasales) y alérgicas (dermatitis atópica).
De acuerdo con el Dr. Julián Londoño, médico alergólogo, una misma persona puede padecer las tres patologías en simultáneo y, anteriormente, el tratamiento consistía en abordar cada una por separado con terapias farmacológicas como los corticoides, lo que representaba un mayor gasto y complicaciones en la salud.
Sin embargo, agrega el especialista, actualmente es posible contar con un medicamento biológico para las tres enfermedades, el cual es mucho más seguro, porque controla las afecciones y, aunque pueden presentarse algunas reacciones indeseadas, estas son mucho más suaves.
“El uso de corticoides a largo plazo era la única opción que teníamos disponible hasta hace poco, pero supone riesgos importantes para el paciente, por la cantidad de efectos adversos que provoca. Algunos de estos son relativamente leves, como cambios de humor, trastornos del sueño y reflujo, pero también se pueden desencadenar complicaciones graves, que van desde ansiedad, depresión y glaucoma hasta diabetes tipo 2, osteoporosis, entre otros», explica el experto.
Asimismo, el Dr. Londoño indica que este fármaco está disponible tanto para adultos como para adolescentes de 12 a 17 años. “Este tratamiento innovador representa una mejora en la calidad de vida de los pacientes y el control de la enfermedad, ya que puede ser utilizado a largo plazo”, expresa el Dr. Londoño.
Por su parte, la Dra. Elizabeth García, médico alergóloga, manifiesta que el paciente debe recibir un tratamiento integral acompañado de atención psicológica o psiquiátrica, ya que muchas veces enfrenta diferentes retos, no solo físicos, sino también mentales y emocionales. «Por ejemplo, quienes padecen de dermatitis atópica sienten un picor debilitante que les impide dormir y, posteriormente, no los deja concentrarse en el trabajo o sus actividades diarias. Su autoimagen está alterada y esto los lleva a sufrir ansiedad y depresión», aclara.
La especialista advierte que, en el caso del asma y la rinosinusitis crónica con pólipos nasales, existen ciertos factores que incrementan el riesgo, como la exposición a ácaros en casa, humo de cigarrillo, pelos de mascotas, polen, humedad y moho. En cuanto a los síntomas, la doctora García destaca que el asma se manifiesta con dificultad para respirar, tos recurrente y silbido en el pecho. Para la rinosinusitis crónica con pólipos nasales los síntomas predominantes son la obstrucción nasal y la pérdida total o parcial del gusto y el olfato, añade.
Por otro lado, la alergóloga señala que los pacientes con dermatitis atópica experimentan signos como el prurito o picor en distintas partes del cuerpo de manera permanente lo que no les permite dormir y altera su calidad de vida. La piel de estos pacientes necesita cuidados especiales como una limpieza diaria, un secado delicado, protección solar especial para pieles sensibles, evitar el roce con ropa sintética y utilizar geles especiales de baño[2].
Esta información fue compartida en el reciente Taller de enfermedades inflamatorias tipo 2 organizado por Sanofi Genzyme. El espacio contó con la ponencia de la reconocida periodista científica internacional Nora Bär, quien resaltó el rol que desempeñan los periodistas y las asociaciones de pacientes en fomentar el conocimiento a favor de la detección temprana de este tipo de enfermedades.
En el encuentro participaron los principales periodistas de la región, así como diversas asociaciones de pacientes. “En Sanofi somos compañeros en el viaje de la salud desde la prevención hasta el tratamiento de las más complejas patologías, por ello fomentamos la investigación y ratificamos nuestro compromiso de acercar la innovación terapéutica a las personas que más la necesitan” afirma Alexis Moyrand, General Manager de Sanofi Genzyme y Country Lead COPAC.
emilio.chavarria@revistamqe.com