La gente hoy día necesita practicidad, y en cuanto a tecnología se refiere esto no puede ser la excepción a la regla.
LG trajo hasta nuestra redacción sus más recientes wireless earbuds (¡la verdad es que en español suena bonito, pero en inglés me gusta más, je je!) LG Tone Free, y no me habían dicho que los probara cuando me los puse, escuché una canción en el celular y en ese mismo momento dije, ¡wow!, que nivel de sonido tienen estos aparatos.
¡Y como si no!, ya que al poseer la tecnología Meridian, como ha sido lo usual (para beneficio de los consumidores) en los más recientes equipos de audio de LG, el audio es fenomenal. Y es que hasta estilo dan (sin mentirles, me entró la curiosidad de verme en el espejo con los audífonos puestos y me dije, “¡ay carajo! ¡que chivas que se ven!”.
Pero bueno, antes de tener el privilegio de utilizar estas bellezas gracias a LG, como debe de ser, le di una ojeadita al manual de instrucciones y a unas referencias que los amigos de relaciones públicas de la marca nos pasaron para conocer más del producto.
Entre otras cosas pude enterarme de que tienen dos micrófonos, uno en la parte superior y otro en la inferior, justo para mejorar la calidad de la voz en las llamadas, y que precisamente el micrófono ubicado en la parte de abajo tiene un sistema para amplificar la voz en caso de que estés en un lugar con mucha gente, como en el supermercado o en una presa mientras manejás, por ejemplo.
(Abro paréntesis) De hecho, para esto hice una prueba llamando a un amigo y le dije, “¡mae!, ¿cómo escuchás mi voz?” Y claro, el chavalo como no sabía el contexto de lo que estaba haciendo se quedó un toque callado y me dijo al rato, “-mae, ¿se siente bien? Diay, yo lo oigo bien. ¿Le pasó algo? Me está asustando”, y se echó una risa medio nerviosa. Al final le expliqué que era que estaba probando la funcionalidad de las llamadas utilizando los LG Tone Free, y luego de dicha aclaración y tras una risa ya más relajada, me dijo que me escuchaba súper bien. (Cierro paréntesis)
Y algo que desde luego vale la pena destacar y llama poderosamente la atención, es el tema del cuidado que LG tiene en la salud de quienes usan estos pequeños pero poderosos Tone Free. Por un lado, su estuche (que valga decir es súper conveniente y fácil de andar en todo lado) tiene una tecnología llamada UVnano, que a través de una luz ultravioleta desinfecta hasta en un 99.9% de bacterias a los audífonos mientras se cargan. Eso ciertamente es algo que no me esperaba en esta clase de dispositivos, pero que es realmente un valor agregado que LG les da a sus usuarios.
Y luego, sus almohadillas están hechas con un material hipoalergénico, en gel de silicona de grado médico, lo que garantiza seguridad y confort al utilizarlos la mayor parte del día.
Porque eso es otra cosa; la carga de los LG Tone Free dura hasta 18 horas para escuchar música y atender llamadas; más o menos el tiempo que en la actualidad pasamos diariamente con los ojos abiertos en este mundo tan ajetreado.
La evaluación
Pero bueno, tras haberles comentado un poquito de las generalidades de los LG Tone Free, ahora sí me toca contarles cómo me fue con el primer uso. Tan solo abriéndolos con la carga que usualmente traen de fábrica, inmediatamente los dispositivos te dan la opción de emparejarlos a tu teléfono celular; algo buenísimo que te hace sentir confiado de que en la primera experiencia LG irá de la mano con vos.
Posteriormente, al hacer el emparejamiento empezás a escuchar las primeras voces que te reiteran que todo marcha en orden, para luego invitarte a que descargués una aplicación especial de LG para el mejor aprovechamiento de los audífonos.
Uno podría tener una idea de las características que podrías encontrarte en los Tone Free de LG, pero cuando abrís la aplicación y te encontrás con un sinfín de opciones para que cuando escuchés tu música favorita lo hagás de la mejor forma posible, eso te emociona. Al menos a mí me pasó.
Los ajustes del ecualizador, la activación del sonido ambiental y las instrucciones de los comandos touch son parte de la guía que vas a encontrar en la app. Además, los Tone Free cuentan con las funciones usuales que tienen los audífonos Bluetooth referente a notificarte de lo que sucede en tu mundo virtual de forma constante (recordá que si eso es un toque molesto no es culpa de los audífonos, solo ándate a las configuraciones de notificación de aplicaciones y desactivá las que querás)
Pero ahora viene la mejor parte: escuchar música. He de confesar que todavía guardo entre mis cosas unos audífonos de LG, los HBS-730, algo viejitos ya pero que siguen funcionando a la perfección, y sé de la calidad de los productos de esta marca; y cuando escuché la primera canción en los Tone Free, no hice más que comprobar que LG procura mantener su esencia y excelencia, pero adaptándose a los nuevos tiempos y necesidades del consumidor.
Definitivamente el realismo, resolución y, a mi juicio, perfecto balance entre voces e instrumentos (lo que los músicos llaman armonía), es algo que podés experimentar en todo su esplendor y de forma absolutamente inmersiva con este magnífico producto.
Y finalmente, como yo que soy amante de salir a correr en las mañanas, son chivísimas porque aguantan el sudor y, además, si me agarrara un aguacero en la calle, también lo soportarían; esto garantizado por su certificación IPX4.
En síntesis, ver para creer o, mejor dicho, oír para creer. He tratado de reflejar, como en un espejo, todas las características que hacen maravillosos, únicos y especiales los LG Tone Free (lo acepto, ¡me enamoré!). Son versátiles, fáciles de usar, livianos pero muy resistentes; pequeños pero poderosos. Sin duda alguna y a ojos cerrados, pero con los oídos bien abiertos, ¡los recomiendo!
roberto.portuguez@revistamqe.com