Ni todo es fuego en el infierno, ni todo es paz en el paraíso.
Porque el cambio nace a través del movimiento y no hay mejor futuro si no hay cambio de rumbo, porque aún el sitio más pacífico requiere dinámica y para salir del infierno a veces hay que bailar con el diablo.
Porque los principales motivadores para transformar tu vida son el miedo al dolor y el deseo de alcanzar el placer, y para mejorar debes salir de tu zona de confort, arriesgar y atreverte a entrar en la zona donde la magia sucede.
Porque los mejores sitios del planeta se han creado a partir de huracanes y terremotos porque “ser” no es estático, porque todo lo que se estanca se muere. Esperanza es saber que aún en los peores días, el sol saldrá y las cosas mejorarán.
Porque requieres atreverte a hacer hasta una locura para tener un resultado radicalmente diferente y el sueño sólo se hará realidad si te levantas de la cama a lograrlo. Porque la ruta de los demás no necesariamente debe ser la tuya y la que ya muchos han seguido sólo es una copia.
Porque vivir no es nacer y por haber nacido nos urge descubrir para qué nacimos, y hacer lo que nos gusta y para lo que tenemos talento; por lo tanto, el mejor trabajo que podemos hacer es autoconocernos, descubrir nuestras virtudes y talentos para entender nuestro potencial real. El más valioso esfuerzo es el de explotar nuestro talento, lo cual nos permitirá rodar más veloces por la ruta de la vida.
Crecemos más a la sombra de gente que puede enseñarnos a ser mejores, el que ya estuvo donde aspiramos llegar, aquel que ya pasó por donde asustan: ese será nuestro mejor maestro. Un buen maestro es el mayor tesoro que podemos tener.
Aunque nuestro entorno marca mucho de lo que seremos, nuestra personalidad es la que define lo que somos y hace la diferencia entre el hoy y nuestro mañana. Hoy es sólo un punto en nuestro camino, que mañana será pasado, y debe servirnos para aprender lecciones que nos aseguren un futuro mejor.
Porque el que escuchó consejo no sólo llegó a viejo, también fue feliz.
Marco Urbina, www.marcourbina.com